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Los periodos vacacionales provocan que las carreteras españolas se llenen de vehículos, incrementándose con ello el riesgo de siniestrabilidad, provocada en el 80% de los casos por la fatiga del conductor del vehículo.
Las principales lesiones que se pueden producir durante la conducción son las torácicas (por uso inadecua-do del cinturón), lumbares o lesiones musculares de la parte posterior del muslo y pantorrilla (por postura inadecuada al utilizar los pedales).
¿Cómo prevenir accidentes en la carretera?
Planifica el viaje con anterioridad, y escoge el horario adecuado, evitando los momentos de mayor circulación.
Realiza paradas cada 2 horas: baja del vehículo y realiza ejercicios de movilidad activa y estiramien-tos para relajar la musculatura implicada en la conducción (cuello, hombros, piernas, etc).
Realiza cambios posturales en el asiento y ejercicios de relajación muscular para prevenir dolores de espalda, pérdida de concentración o cansancio general.
Evita comidas copiosas, bebidas alcohólicas y estimulantes como la cafeína.
Hidrátate adecuadamente
Si viajas en coche, recuerda regular:
La altura y respaldo del asiento: las piernas deben estar ligeramente flexionadas y las manos acce-der cómodamente al cuadro de mandos.
La altura y sujeción del volante, asegurando la relajación de hombros y espalda.
El cinturón de seguridad y el reposacabezas, de manera que los ojos queden a la mitad de su altura.
Los retrovisores, para poder utilizarlos sólo con desviar ligeramente la mirada, sin obligarnos a girar la cabeza.
En viajes largos de avión
Para evitar sufrir los riesgos para la salud del síndrome de la clase turista, podemos realizar ejercicios senci-llos que nos permitirán desentumecer nuestros músculos y activar la circulación sanguínea:
Sentados con las piernas juntas, ponernos de puntillas durante 10 segundos y relajar, o elevar las piernas separando los pies del suelo unos centímetros y aguantar unos segundos en esa posición.
Ejercicios de movilización activa de cuello, hombros y tobillos.
Apretar una palma contra la otra a la altura del pecho, con presiones intermitentes.
Colocar un pequeño objeto (revista, cojín) entre las rodillas, apretar una pierna contra otra, y levan-tarlas y bajarlas a la vez.
Recuerda que la prevención es el mejor seguro para disfrutar al máximo tus vacaciones!