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La campaña se desarrolla conjuntamente con los colegios de Madrid, Cataluña y Navarra
La fisioterapia puede ayudar a prevenir el linfedema, consecuencia crónica pero evitable del cáncer de mama. Este es uno de los motivos por los que el segundo vídeo de la campaña del Colegio Oficial de Fisioterapeutas del País Vasco (COFPV) “12 meses, 12 consejos de salud” trata de concienciar sobre la importancia de estos tratamientos preventivos. La campaña se realiza conjuntamente con el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, el Colegio Oficial de Fisioterapeutas de Navarra y el Colegio de Fisioterapeutas de Cataluña.
Así, el objetivo de la Fisioterapia en este aspecto es mejorar la calidad de vida de las mujeres con cáncer de mama para quienes el Linfedema supone un importante obstáculo en el desarrollo de determinadas actividades cotidianas, sociales y laborales.
En este sentido, los fisioterapeutas vascos han explicado que el cáncer de mama es el tumor más frecuente en las mujeres de los países desarrollados y una patología cuyos tratamientos pueden provocar la aparición de efectos secundarios como el linfedema. Esta complicación provoca la inflamación de una extremidad, generalmente el brazo, como consecuencia de la acumulación de líquido tisular que se encuentra entre la piel y el plano muscular. Aparece tras la intervención quirúrgica para extirpar el tumor en la zona mamaria, si en ésta se suprimen además, un determinado número de ganglios axilares.
Los síntomas más apreciables son el aumento del volumen del miembro afectado, edema, pesadez, enrojecimiento, asimetría física, desfiguración y problemas de movilidad, dolor y riesgo de infección entre otros, afectando a la funcionalidad de la extremidad.
Como prevenirlo
En este sentido, los Colegio Profesionales participantes en esta campaña aseguran que en el caso del cáncer de mama, el linfedema secundario a la extirpación se puede producir en el 25-30% de los casos en que se extirpan los ganglios y es uno de los efectos con mayor impacto. Sin embargo, informan de que aunque una vez que aparece se convierte en una complicación crónica, se puede prevenir si se comienza con las medidas preventivas inmediatamente después de la intervención quirúrgica.
El COFPV recomienda a las pacientes operadas de cáncer de mama “realizar un programa de ejercicios de movilidad del brazo, para evitar que se produzcan complicaciones”, además de someterse a un seguimiento regular, por parte de un fisioterapeuta, para que pueda educarla en unos hábitos higiénico-sanitarios adecuados.
Además, aconseja a las mujeres susceptibles de sufrir ese problema, evitar procedimientos médicos en el brazo afectado, como pinchazos, tomar la tensión arterial, etc.; mantener la piel bien hidratada; evitar heridas y curarlas bien si se producen; intentar no realizar movimientos repetitivos, tareas pesadas ni sobreesfuerzos con esa extremidad, y no exponerla a altas temperaturas, ni utilizar ropa o complementos ajustados.
Asimismo, les recomiendan no practicar deportes de impacto y llevar estilos de vida saludables, realizando actividad física regular, llevando una dieta equilibrada, y evitando hábitos tóxicos, etc.
Igualmente, explican que si en algún momento la persona nota que la extremidad se hincha, debe acudir inmediatamente al médico y a continuación al fisioterapeuta, que lo valorará y pautará un tratamiento. Actualmente, las técnicas que se utilizan para tratar esta patología son el drenaje linfático manual, la presoterapia, el vendaje multicapa y los manguitos de contención.
Todas tienen como finalidad disminuir el volumen de la extremidad y mantener el tejido en estado óptimo. En este sentido, los fisioterapeutas recuerdan que es importante tratar el linfedema desde el primer momento y aseguran que los profesionales de la fisioterapia acompañará siempre al paciente hacia una meta: la vuelta a la vida normal.
El Colegio Oficial de Fisioterapeutas del País Vasco representa en la actualidad a más de 2.000 profesionales que ejercen la profesión en Euskadi y con esta campaña conjunta con sus homólogos madrileños, catalanes y navarros quiere ayudar a la ciudadanía a prevenir y curar muchas de las patologías más frecuentes.